En los últimos meses, he tenido la oportunidad de juntarme y conocer en persona a muchos artistas y productores nacionales que publican en la escena netaudio o gestionan netlabels o plataformas de difusión. Con ellos he compartido música, hemos hablado largo y tendido sobre esta nueva cultura musical y he podido conocer de primera mano las inquietudes de un colectivo muy activo y con ganas de hacer cosas, moverse y luchar por esta alternativa al status quo de la industria musical.
A todos ellos, les he planteado varias preguntas que llevan meses asaltándome y me preocupan, estas son: ¿por qué en la escena Netaudio no existe, de manera clara y evidente la crítica negativa? ¿por qué a nadie se le ocurre hacer críticas negativas? ¿por qué no hay Charts de lo peor del Netaudio en el 2010? ¿por qué nadie se atreve a decir que netlabels o artistas que publicaron grandes discos en el pasado ya no lo hacen? Cada uno de mis interlocutores ha contestado acorde con su postura mostrando interés acerca de este incipiente debate. Muchos de ellos, han expresado esa lista de “me gusta” y de”no me gusta”, y se han mostrado abiertos a plantear qué pasa en ese sentido y cada uno a dado su punto de vista sobre por qué no hay crítica.
Con este texto no pretendo hacer una lista de lo peor de la escena netaudio ni asaltar bastiones inexpugnables de respetabilidad, sin embargo me gustaría que todos hiciéramos un ejercicio de autocrítica, que seriamente nos planteáramos qué sucede en esta red cultural en la que nadie se atreve a decir: este disco es malo o este netlabel ya no es lo que era. ¿Por qué sucede? ¿cuál es el miedo que nos asalta y no nos permite expresar de manera abierta y libre cuando algo sinceramente no nos gusta o decepciona?
Así que bueno, con esto no quiero decir que debamos abuchear al artista que hace un disco malo o el netlabel que deja de publicar discos interesantes, sin embargo si que hace falta que seamos un poco sinceros los unos con los otros. Que digamos claro y alto las cosas, siempre con respeto y sin ofender pero dejar claro cuando algo no nos gusta, porque sinceramente, oír críticas positivas es bastante aburrido, tedioso y relamido.
Vengo de una educación en dónde la crítica constructiva es una parte fundamental del proceso creativo. A lo largo de varios años trabajando en el mundo del arte o estudiando en ese entorno he llegado a la conclusión que los mejores proyectos son aquellos que se discuten, debaten y critican. La crítica es una parte fundamental de la creación y un catalizador de la motivación para seguir trabajando así que yo propongo, sumemos ese punto a la lista de cosas pendientes para la escena Netaudio: la crítica y por consiguiente, la sinceridad son elementos que pueden mejorar nuestro trabajo hacer que evolucione, crezca y mejore.
A todo esto como productor de Audiotalaia y como artista publicando bajo licencias CC estoy abierto a críticas, positivas y negativas, seguro que les sacamos provecho.
